Y julio casi acaba... las predicciones del RCP blog se hicieron todas verdaderas (debería de volverme astrólogo) y ahora solamente espero unos cuantos resultados de exámenes para ser más o menos libre de ir a Egipto.
Como no tengo la disciplina para escribir un resumen cada mes (ni casi para hacer cualquier otra cosa) debe parecer un completo plagio si empiezo a resumir lo que pasó en Julio. De todas maneras, este Julio fue muy parecido a mi Julio de hace 2 años, que las personas que me conocen saben que marcó un verano mítico y memorable.
Este verano también conocí a un montón de gente de muchos lados del mundo, me divertí con ellos, traté de resolver sus problemas, traté de mostrarles lo poco o mucho de bueno que tiene nuestro país y si resulta que ellos son honestos, parecen contentos de la experiencia aqui.
Viajé a México DF para un curso muy interesante de Medicina Hiperbárica, muy bien acompañados (merci pour tout Magali et Armelle c'etait un bonne week-end, c'est pas vrai?), y pues ahora está la triste despedida... lo sé... lo sé... es melodramático conocer a alguien solamente por un mes y pretender que en tan poco tiempo puedes acostumbrarte tanto como para extrañarle... pero pues en ese caso supongo que soy algo melodramático. Cada año que viene es una eterna despedida de lo que podría ser el comienzo de una bella amistad (palabras de Casablanca).
Asi que Julio siempre termina con ambivalencia, por lo que viene y por lo que podría ser si no se fuese. Pero esta ambivalencia es buena, te mantiene alerta y consciente, te muestra demasiado fácilmente como las cosas terminan y empiezan a la vez, me siento afortunado de tener la oportunidad de ver una perspectiva de la vida de manera tan clara. Sintiendote triste por lo que finaliza y emocionado por lo que puede seguir.
Vienen tiempos buenos, viene un viaje más, y ahora tengo muchos libros que leer (grazie mille Aarón)... ¿dónde termina ese camino que llamamos madurar?...
Termina justo en donde hallamos la respuesta.
2 comments:
Termina en la pudrición.
Eso es... dónde termina el camino que llamamos madurar??
Te lo diré cuando encuentre la respuesta aunque hoy por hoy puedo decir que jamás acabamos de madurar..., hasta el último día de nuestra muerte.
Ojalá nunk maduraramos, ojalá simpre fueramos unos niños, inocentes y divertidos a la vez, alegres y soñadores, luchadores por la ilusión.
Arriba al optimismo! Y jamás te sientas triste por lo que acaba sino contento por lo que empieza.
Un beso enorme Ger
Mentre la lluna brilli, sempre hi haurà algú que t'acompañi!
Sueña y serás feliz...
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