Allez le bleu!!!

Paris, la amante ingrata, la femina fria, elegante, presumida y coqueta; la ciudad de las luces, de la revolucion, de la ilustracion. La ciudad cultural, cosmopolita por excelencia; como una muchacha que su negativa de recibirte te hace desear mas estar ahi.

Pues todo cambio, del paisaje invernal que me recibio hace ya mas de 18 meses parece un mal recuerdo mio que solo persiste en mi mente, la escarcha cortante y el viento gelido dieron paso a brisas agradables y atardeceres espectaculares en el Sena.

La Paris ingrata desaparecio en el verano, y me recibio con 35 grados y una hospitalidad irreprochable, despues de hacer unos cuantos malabares con las comunicaciones Mexico-Europa-Mexico, con la invaluable ayuda de mi quasifratello Aaron, mi fratello de verdad Luis y la Zairilla, pude encontrar a mi amable anfitriona :) (merci Su!)

Despues de una ducha y deshacerme de los kilos de equipaje que tenia, nos lanzamos a la solidaridad gala, a ver el partido Francia-Brasil... en el estadio, cerca de la Cite Universitaire. Ahi, si quedaba alguna duda del corazon de los franceses, de su humanidad, quedo eliminada, cambiamos al segundo tiempo a un restaurant cerca de ahi para ver mejor el juego, y despues de la impactante victoria, el encargado regalo champagne para todos. Vaya primera noche!!

Luego de eso, a caminar, a reecontrarme con mi amiga Marion, y a darme cuenta que ahora hasta me sobraban opciones donde quedarme, noche de fiesta, de gritar, de cantar porras. Creo que escribire una apologia al futbol. Rumbo a las 3:00 horas de ya el domingo, nos dirigiamos a tomar el autbos nocturno... imposible, demasiado lleno, incluso para solamente los 3 pasajeros mas que eramos (Marion, Latifa y yo). Asi que a pedir ride (autostop :p) para mi sorpresa, nos levanto una medio camioneta que llevaba remolcando una plataforma donde habia 2 chicas todavia gritando y cantando Allez le bleu!!!, nos subimos, yo fiandome de mis guias, finalmente llegamos a casa de Marion donde pude descansar cuando ya el sonido de los pajaros anunciaba el alba.

Siguiendo con el derroche de amabilidad, me recibio al despertar la familia, una mesa con ensalada hecha de ingredientes que el propio padre de Marion habia concinado, un corte impresionante de carne, taboule... y una botella de Bordeaux, demasiado para mis modestas aspiraciones de tacos de tlaquepaque, pero se le hizo honor.

Luego a empezar el turismo, por una agraciada coincidencia era el primer domingo de mes, y el Musee d'Orsay era gratis, como todos en Paris ese dia. Impresionante, todo el impresionismo esta ahi, Cezanne, Pisarro, Van Gogh, Monet.... aun no veo mi pintura favorita de Van Gogh pero algun dia.

Al final, un paseo por Saint Michel, Notre Dame esta completamente restaurada y es impresionante, aun y que ya la habia visto, la blancura que ahora presume no hace mas que estremecerme. Camino al lado del Sena, Marion guia a una region donde a veces hay musica, y ese a veces es un siempre; de camino escuchamos una vieja cancion de mar portuguesa cantada por una chica con un violoncello y un joven con un acordeon antiguo, una voz perfecta.

Luego, el Sena se volvio Cuba y Brasil, lecciones de salsa cerca del pont neuf; Capoeira al lado del rio que concluye cuando en una patada impresionante un chico destruye un instrumento musical; ese seria el preludio de mis intentos de bailarin, que culminaron con cansarme mucho, pero con la divertida idea de que baile salsa en el Sena y que al parecer no hice el completo ridiculo.

Paris Cambia, Paris se esfuerza en seducirme