Friday, August 26, 2005

¿Existe o no?

En una discusión existencial entre varios blogamigos (que pata palabra), se discutió el hecho de que la imposibilidad de probar verdaderamente algo (fuera de las matemáticas) en la vida, te da mucho espacio de creer en lo que tu creas, esto fue lo que respondí:

El hecho es que el espacio que te da la imposibilidad de no poder probar nada, tiene que tener una línea; que trazas para tener un concepto de realidad que funcione para las razones prácticas de nuestra especie.

Es decir, ese punto de que no puedes probar nada, te puede llevar a decir que los duendecitos mágicos del sur de irlanda son los causantes de que haya accidentes automovilísticos en todo el mundo, que desaparecen muy rápido para detectarlos y que se juntan todos los jueves en el Das Bier Haus de contry. El problema con eso, es que considerando una persona que REALMENTE creyera que sucede, estaríamos al menos muy tentados a dudar de su salud mental.

Por esa razón una línea práctica de lo que existe, de lo que es causal y determinístico hasta cierto punto, debe de trazarse cuando se trata de describir a la naturaleza; aqui el punto fundamental (a como lo entiendo) de las matemáticas, es que siendo un mundo abstracto (una metáfora algo cliché si se me permite) donde definimos reglas lógicas, se pueden demostrar argumentos sin dejar dudas.

En la vida "real" o en la naturaleza ésto no es así, ya que hay impedimentos de orden práctico para poder considerar todas las variables que intervienen en un sólo fenómeno, e incluso pareciera que teniéndose completamente todas las variables, habría un cierto grado de incertidumbre (eso habría que preguntarle a los físicos.. es su chamba)

De todas maneras, para ejemplos prácticos, tomamos lo que reduce nuestra realidad (reduce por asi decirlo) a aquello que podemos utilizar para la creación de un modelo comprensible y con suerte controlable de lo que es real (valga la redundancia).

Por ejemplo, con los mismos argumentos que se puede afirmar la existencia de dios, se puede afirmar la existencia de un delorean superinteligente en la órbita de saturno (argumentos com: yo realmente lo siento, no lo he visto, pero sé que está ahi, nos está observando a cada minuto, nos comprende y nos cuida). Lo genial de todo es que no se puede probar que NO es cierto, pues podría de hecho, ser verdad, ya que como dijimos : no podemos demostrar nada en el mundo real.

Ahora, una definición práctica de aquellos objetos que llamamos reales, consiste en todo aquello que pueda ser percibido a traves de los sentidos, que sea medible, o que se puedan apreciar sus efectos con un cierto nivel de seguridad, y a este universo de objetos, catalogarlos como reales.

La entidad que se pretende sea dios (que aclaro de una vez, no sé si existe o no...) ciertamente no influye directamente con las "leyes" que hemos deducido de la naturaleza que hasta ahora han funcionado más o menos bien y están en constante evolución, (aunque bien arguyendo que es omnipotente podría incluso modificarlas a su antojo sin que nosotros comprendieramos).

Esta entidad no interacciona directa o indirectamente de una manera irrefutable con los objetos que hemos definido como reales. Si bien podríamos admitir como verdadera la existencia de dios (ya que como hemos visto, NOSOTROS definimos el concepto de existencia); el hacerlo denota en conflictos prácticos, del orden que de la misma manera podemos poblar todo el universo de "entes existentes fuera de la existencia", como el diablo, los ángeles, santa claus etc etc...

Pues si es algo que no se puede apreciar de ninguna manera, ni sus efectos ni se puede percibir que interactue con lo que si podemos medir y apreciar (aunque sea a través de la imperfección de los sentidos), se le puede dar el privilegio de la existencia aunque en realidad no parece revestir de carácter práctico (esto ya es una apreciación personal).

Dando ya mi punto de vista personal, el sentir que yo tengo respecto a dios y ese tipo de cosas, es que hay cosas en esta vida (que me toco vivir sin pedirme permiso) a las cuales catalogo como que existen, y como que funcionan y por ende se podría decir que "creo" en ellas, aunque lo más correcto sería decir que las "sé", no en el sentido de que este convencido que son verdades absolutas e irrefutables, sino en el contexto de que son perfectibles pero es lo que mejor se acerca a describir mi realidad ahora mismo. Entre esas cosas están los conocimientos de medicina que tenemos, la bioquímica, la evolución, la neuropsiquiatría , y muchas otras por el estilo.

Concibo ademas, otro grupo de cosas que por su dudosa evidencia (o falta de ella) y por contravenir toda lógica que me sirva para darme una idea real del mundo considero "no existentes" (que desdeluego es una posición mutable en el supuesto que alguien muestre evidencia fuerte de su existencia), entre ellas están: los duendes, las hadas, santa claus, el conejo de pascua, el ratón de los dientes... etc, etc. podría decirse de ellas que "sé que no existen" (aunque de nuevo dicha frase no implica que soy inmutable a la luz de evidencia respetable)

Una tercera categoría de cosas, son aquellas que no hay tanta evidencia a favor, ni en contra y que realmente no sé si existan o no e incluso parece hasta ahroa que es imposible demostrar uno u otro veredicto, entre esta categoría están dios, los magnetos monopolos, la materia negra y la solución a la hipótesis de Riemman. Estos objetos son cosas que dejan libertad a "creer" en su existencia sin tener evidencia, lo cual es sumamente válido, el único inconveniente que veo es que admitir una excepcion de tal talla te hace ser incongruente con la existencia de otras entidades hipotéticas.

Ya para terminar este largo comentario, supongo que las personas relacionadas a las ciencias de la salud o a la biología, son más propensas a ser "no creyentes" porque deben de tener un trazo muy firme de la realidad. Aqui no importa si la hipótesis de Riemmann es real o no.. nadie muere (al menos eso espero), pero la "creencia" dogmática que un remedio casero puede quitar el cáncer puede impedir que una persona tome el tratamiento comprobado y ahí una vida hace una diferencia, todo por el simple hecho de tomar como verdadero algo sin evidencia (y que tristemente sucede más comunmente de lo que desearíamos).

Una razón más de esto, es que en el ámbito de la biología y las ciencias médicas, el contacto diario con el sufrimiento (tanto de los animales como de los seres humanos) te hace más renuente a aceptar que exista una inteligencia al menos como concebimos el concepto de ella, capaz de permitir tanto dolor, teniendo el poder de evitarlo. Sería desmoralizante, o al revés, preocupante, saber que el médico que debe de estar ahi para salvar tu vida, cree que "dios" ya decidió si vives o no, uno.. por el hecho de que puede no hacer todo lo que debía por resignación, o 2 porque se siente desde el principio como un instrumento de un poder divino (yo creo que por eso dicen que los médicos tienen complejo de dios...)

bueno, esto es solo un poco de lo que opino al respecto.. ciao

3 comments:

F. Dwarf said...

Hombre, no tiene nada que ver con tu post, pero ahì va.

It always happens to my friends
it always happens to me

Y con los siguientes tres versos ya te puedes dar una idea de lo que pasò.

Me sentì igualito

F. Dwarf said...

ah, estùpido virus Sasser...te decìa que me sentì igualito que como cuando escucho Moonlight Sonata (Claro de Luna)...if you know what I mean

Hector Flores said...

No quiero ser aguafiestas. Pero en matematicas tampoco es posible demostrar nada.
(Vengan los tomates).

Los logicos dicen que a los matematicos les gusta jugar a que demuestran cosas.

En el libro "Gödel, Escher, Bach: An Eternal Golden Braid" hay una explicacion chida donde se ve que si las siguientes proposiciones son verdaderas:

1) P.
2) P=>Q.

No es demostrable que Q lo sea.
Basicamente porque 1 y 2 NO son suficientes. Tambien se necesita

3) (P y P=>Q) => Q.

Lo que quiero decir es que en matematicas SUPONEMOS que nuestra forma de deducir cosas es correcta, además de suponer que los axiomas son verdaderos.

Claro que no podemos andar por ahi creyendo que razonamos mal.
Si la forma en la que hemos razonado los ultimos años no nos ha metido en broncas, pues adelante.